Tanto si eres un apasionado del mundo del motor como si no, tienes que conocer la leyenda del Lancia delta HF. Un coche que registró unos grandes resultados tanto a nivel de calle como en los rallys internacionales, aspecto que le sirvió para convertirse en uno de los automóviles de éxito del momento al granjearse tanta popularidad. A pesar del éxito que tuvo el modelo, hubo uno que destacó por encima de los demás, el modelo Martini. Se fabricó durante el año 1992 de forma especial para conmemorar el mundial de rally obtenido en 1991 y también los 6 anteriores, ya que fueron ganados por el Lancia Integrale de forma consecutiva.
Estamos hablando de uno de los coches más potentes para su época ya que contaba con un motor de 1.995 centímetros cúbicos, de 4 cilindros y 16 válvulas. Era capaz de conseguir hasta 210 caballos de potencia, una auténtica bestia de la carretera. Junto a estos aspectos de motor, había que añadir que contaba con cambio de marchas manual, algo lógico en aquella época y que permitía hasta 5 velocidades, además de una suspensión individual en cada uno de sus ejes. Además, para destacar todavía más que el resto contaba con rodamientos de teflón en la transmisión.
Los utilitarios
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Como hemos visto en los párrafos anteriores, buena parte de su reputación venía marcada por la consecución de tantos rallys de forma consecutiva. Gracias a ello que muchas personas se atrevieron a incorporar diferentes versiones y modelos de Lancia Integrale en su día a día. Para llegar a esto, tenemos que remontarnos a 1987 en donde ya montaba un motor con turbo y ocho válvulas que permitía alcanzar una potencia de hasta 185cv. Para aquella época, era realmente impresionante.
Con el paso del tiempo el modelo fue actualizándose y ya fue entrado en el año 1989 cuando se actualizó, suministrando todavía más potencia por parte del motor en donde llegaba hasta los 200 caballos y más tarde, a principios de los 90, superaba en 15 caballos la cifra anterior, llegando a 215. La potencia se iba aumentando y el modelo evolucionando alrededor de esta ya que para poder seguir consiguiendo toda esta capacidad, debería de recibir actualizaciones como la del eje trasero en donde transmitía más potencia.
La potencia como seña de identidad en este Lancia HF
Sin lugar a dudas la potencia de este coche era un seña de identidad y los amantes de la conducción se peleaban por montarse en uno de ellos. Gracias a su turbo, el coche sobrevolaba la carretera y se agarraba a las curvas como alma que lleva el diablo, aspecto que también le costó algunas críticas por parte de algunos usuarios ya que a muchos se les atribuía una conducción temeraria del mismo, fruto de las características del propio vehículo.
Sin embargo y más allá de toda crítica, el funcionamiento del coche era excelente. Contaba con un sistema de frenado que estaba a la altura de la potencia que tenía y unas suspensiones bastante aceptables. Además, contaba con cinco puertas, lo que le convertía también en un importante coche familiar, compaginando esta vida con la de coche de carreras.
Lancia HF Integrale, el sueño de una generación
El Lancia Delta HF Integrale fue el sueño de la juventud de muchos de nosotros y pasados los años, todavía hay personas que siguen comprando alguna versión de segunda mano del mismo. Aquellos que no pudieron cumplir su sueño de más jóvenes, todavía tienen la oportunidad de hacerlo ya que este Lancia Delta todavía sigue rodando por algunas carreteras y hay quien tiene la suerte de poder disfrutarlo. Fue un coche que salió francamente bien y que con un cuidado estándar, todavía nos puede ofrecer kilómetros para rato.
Puede que los años hayan pasado y que los coches hayan evolucionado, pero la pasión y las ganas que despierta el conducir un coche como estos, que pisas el acelerador, suena el turbo y te aprieta contra el asiento, no tiene comparación. Por este motivo, el Lancia Delta HF Integrale y sobre todo, su versión Martini, pueden entrar de lleno en el olimpo de las leyendas de los coches, tanto utilitarios, como los de competición.